El mundo maya bajo el agua, en Quintana Roo

La exploración de los cenotes y sistemas subacuáticos en la Riviera Maya empezó en la década de los ochenta cuando intrépidos buzos comenzaron a incursionar en sus profundidades. Desde aquella época, en el área entre Puerto Morelos y la reserva de la biósfera de Sian Ka’an, más de cien sistemas de cuevas y más de 550 km de pasajes completamente inundados han sido explorados y topografiados.

Se han identificado dos niveles en estos sistemas. Uno se extiende desde la superficie hasta una profundidad de 30 metros aproximadamente y el nivel basal se encuentra a más de 100 metros de la superficie. La cueva más profunda en la zona es el Sistema Dos Ojos, con una profundidad máxima de 119 metros. Siete de los diez sistemas subacuáticos más largos del mundo están en nuestro patio trasero.

El más largo de todos ellos, el Ox Bel Ha, está también considerado como la cueva más larga (inundada o no) en la República Mexicana, y la novena del planeta. Esto se torna aún más interesante al saber que los 144 km de pasajes de cuevas están totalmente inundados y continúan siendo explorados.

Siguiendo los pasos de los exploradores está la comunidad científica. Prácticamente todas las disciplinas científicas se encuentran trabajando árduamente para comprender las diversas capas de la península. Por ejemplo, el ornitólogo Dr. James Rotenberg de la Universidad de Carolina del Norte estudia el uso de los cenotes por más de 2,000 millones de aves migratorias que cruzan la península cada año.

El botánico Jason Hblakos de la Universidad de California, en Riverside, está estudiando evidencias de que los antiguos mayas cultivaban una variedad de árboles originarios de Oaxaca en los ambientes húmedos de los cenotes. El Dr. Fernando Álvarez, de la UNAM, y el Dr. Tom Illife, de la Universidad de Texas A&M, en Galveston, están estudiando las 38 formas de vida encontradas en estos sistemas, relacionándolos con especies tan lejanas como las Bahamas.

El arqueólogo Dr. Scott Fedick y Jeffrey Glover, también de la Universidad de California en Riverside, están buscando cómo estos depósitos de agua manantial determinaron los patrones de asentamiento de los mayas por la región. El arqueólogo Dr. Dominique Rissolo está estudiando el uso de cuevas secas y cenotes en esta zona como espacios sagrados de los antiguos mayas; y la arqueóloga Carmen Rojas y el biólogo Arturo González están lidereando los esfuerzos del Instituto Nacional de Antropología e Historia para estudiar los restos arqueológicos encontrados debajo del agua. Lo que han descubierto es absolutamente sorprendente.

Hallazgos arqueológicos
En los últimos tres años, el INAH ha fechado positivamente tres esqueletos humanos encontrados en el área cercana a Tulum, con más de 10 000 años de antigüedad. Para poner esto en perspectiva, hasta hace tres años sólo existían diez esqueletos humanos en el hemisferio occidental que han sido probados tener una antigüedad de más de 10 000 años.

Sus esfuerzos, en colaboración con la comunidad de espeleobuzos, han incrementado esta cifra 33% y el número sin duda seguirá aumentando. Por si eso fuera poco, uno de los esqueletos podrían ser de hace 13 000 años, lo que lo convertiría en el más antiguo encontrado en el hemisferio occidental. Además de estos hallazgos increíbles, no menos de cinco esqueletos de elefantes prehistóricos y muchas otras especies de megafauna del Pleistoceno se han encontrado en las profundidades de los sistemas.

Más cerca de la superficie se han ubicado importantes depósitos arqueológicos de la antigua cultura maya, que también están siendo evaluados. Resumiendo, los cenotes son ventanas hacia otras épocas, que nos muestran la vida a través de las diferentes épocas.

Preocupaciones
El turismo representa cerca de un tercio del Producto Interno Bruto de México. Cancún y la Riviera Maya atraen aproximadamente 40% de las divisas, así que esta área contribuye casi 12% al PIB del país. Al matar a esta «gallina de los huevos de oro» arriesgamos el futuro no únicamente de un ambiente saludable, sino también de una economía saludable, no sólo regional, sino nacional.

Las buenas noticias son que hay acciones que se están llevando a cabo. Funcionarios de todos los niveles del gobierno, líderes empresariales locales, la comunidad científica y asociaciones no gubernamentales están trabajando para encontrar soluciones que garanticen la salud del manto acuífero y brindar así un espacio saludable para las futuras generaciones. Nadie está en contra del desarrollo de esta zona, lo que estamos apoyando unánimemente es una infraestructura sustentable que permita que esta zona siga prosperando.

¿Qué es un cenote?
La península de Yucatán forma una de las plataformas de piedra caliza más grandes del mundo. Abarcando más de 250 000 km2, y con un espesor de más de 2.5 km en algunas zonas, fue formada a través de millones de años mediante la deposición de carbonato de calcio proveniente de arrecifes ancestrales.

A través de varias eras glaciales, los niveles oceánicos aumentaron y disminuyeron en promedio 120 metros, sumergiendo y descubriendo esta plataforma en cada ciclo. A veces, mientras estaba descubierta, el agua de lluvia, mezclada con dióxido de carbono, formó un ácido débil en solución, disolvió la caliza y formó cuevas.

Al terminar la última era glacial, hace aproximadamente 18,000 años, los casquetes polares se derritieron, el nivel medio del mar aumentó y las cuevas se inundaron. Las entradas a estos sistemas inundados, o ríos subterráneos, son llamadas cenotes, derivado de la palabra maya dzonot, que significa “pozo sagrado”.

Importancia de la hidrología
Uno de los principales esfuerzos dentro de la comunidad científica es comprender la hidrología de la zona. Con el liderazgo del Dr. Luis Marín, de la UNAM, quien ha trabajado extensamente en la zona noroeste de la península, este importante e invaluable estudio está apenas comenzando, pues se conoce poco acerca de cómo funciona.

Lo que conocemos acerca de este acuífero se puede resumir en lo siguiente:

• Existe un lente de agua dulce por toda la península. Una capa de agua salada por debajo soporta este lente. Mientras más hacia el centro de la península se mueve uno, más profundo el lente de agua dulce. En Playa del Carmen es de 12 a 15 metros de espesor; en Mérida es de más de 60 metros.

• Por la costa de la Riviera Maya el agua dulce fluye a través de los ríos subterráneos y sale hacia el Mar Caribe de manera más notable en caletas, por ejemplo, Xel Ha, Xcaret, Tres Ríos, Yalku y Xpu Ha.

• Se ha medido un importante flujo de agua salada hacia el interior a través de los niveles más profundos en los sistemas cavernarios.

• Debido a la naturaleza porosa de la caliza, el acuífero de esta zona es extremadamente sensible a la contaminación.

• Uno de los principales factores que contribuyó a la caída del imperio maya se relacionó con el agua, específicamente una sequía cíclica. Sin lugar a dudas es por eso que el dios de la lluvia, Chaac, era tan importante.

• La fragilidad de los sistemas de cuevas y el acuífero se demuestra claramente en el caso del sistema Ox Bel Ha. Éste se extiende por 9 km hacia el interior, desde las playas de Tulum, hacia la jungla. Un buzo puede entrar por un cenote 8.5 km tierra adentro y navegar por el sistema hasta salir a los arrecifes de Tulum sin ver la luz del día. Si un buzo puede realizar este recorrido, también lo puede hacer cualquier contaminante que entre.

• Los afluentes de un tiradero de basura, una planta industrial o de tratamiento de aguas podría tener efectos desastrosos, no únicamente en los recursos de agua dulce de la zona, sino también en todos y cada uno de los ecosistemas con los que esta cueva se conecta.

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