Salvatierra
Localizado al sur de Guanajuato, este Pueblo Mágico te conquistará con sus tesoros arquitectónicos, entre los que destaca el Templo de las Capuchinas (parte de la Ruta de los Conventos).
Escápate un fin de semana:
Vuelo en Globo San Miguel de Allende
Salvatierra: Por la Ruta de los Conventos de Guanajuato
Este Pueblo Mágico, ubicado al sur del estado de Guanajuato, junto al río Lerma, es un escenario de batallas históricas y testimonios arquitectónicos que bien valen la pena admirar. Salvatierra muestra una gran riqueza en sus construcciones, tanto civiles como religiosas, de las que destacan el Templo y Convento del Carmen, la Iglesia de Nuestra Señora de la Luz y el Puente de Batanes, testimonio de la victoria de Agustín de Iturbide en el Puente Batanes, camino hacia la Independencia de México.
En este poblado podrás descubrir casonas virreinales y porfirianas en muy buen estado que, junto con sus plazas y portales, dan vida a un ambiente tranquilo y acogedor. Además, el maravilloso Convento de Capuchinas -que forma parte la Ruta de los Conventos guanajuatense- y las haciendas de los alrededores dan fe de su historia y tradición que todo viajero podrá admirar.
Conoce más
En su camino a Valladolid (hoy Morelia), el cura Miguel Hidalgo y su ejército pasaron por Salvatierra; ahí se hospedó por una noche en el mesón de la luz. El 16 de abril de 1813, en el Puente de Batanes tuvo lugar la batalla entre el ejército insurgente, al mando de Ignacio López Rayón y el ejército realista, comandado por Agustín de Iturbide, quien, al salir victorioso, fue a darle gracias a la Virgen de la Luz y a regalarle su banda azul, kepis y bastón, nombrándola generala del ejército realista.
Lo típico
En este pueblo podrás adquirir manteles y servilletas bordados, así como deshilados y figuras en papel maché. En la Casa de las Artesanías hay artículos como playeras estampadas, joyería, separadores y figuras en barro.
A siete kilómetros rumbo a Yuriria, en la comunidad de San Pedro de los Naranjos, se venden muchas artesanías, en especial objetos elaborados en barro, como fuentes, lámparas, jarrones y macetas.
¿Quieres escaparte a Guanajuato? Descubre y planea aquí una experiencia inolvidable
Templo y Convento de las Capuchinas
Data de fines del siglo XVIII y es uno de los mejores tres ejemplos de arquitectura religiosa destinada a las monjas del estado. Su imagen exterior asemeja a una fortaleza, siendo su autor el reconocido arquitecto Joaquín Heredia. Durante el porfiriato, se alojó en este inmueble el Hospital Civil y después la escuela parroquial, aún vigente. Como todos los templos de monjas, la entrada es por uno de sus costados, donde podrás observar dos portadas gemelas de ornamentación barroca. El largo muro de su fachada exhibe contrafuertes de tezontle, piedra rosa y cantera gris. En su interior se distinguen el coro alto de gran tamaño y la tribuna del presbiterio.
Otros templos y construcciones de interés
El recorrido por Salvatierra puede comenzar en la apacible Plaza de Armas, donde varios prados y árboles que brindan sombra circundan el quiosco. Desde ahí pueden observarse las enormes torres de la Parroquia de Nuestra Señora de la Luz, construida entre 1743 y 1808. Su interior es de estilo neogótico; y en el altar mayor, de estilo neoclásico, se aloja la imagen de la Virgen de la Luz. A un costado (en lo que era el antiguo convento) se halla el Palacio Municipal.
El Templo y Convento de Nuestra Señora del Carmen fue la primera construcción levantada en Salvatierra y se remonta a 1646. Su estilo es barroco churrigueresco, con decoración exquisita, y en los costados de la nave principal pueden apreciarse retablos con temas místicos. Posee una linda capilla dedicada al Niño de Praga.
También es digno de visitar el Templo de San Francisco de Asís, el templo del barrio de San Juan -de cal y canto donde se venera al Señor del Socorro-, la fábrica de zapatos La Reforma (fundada en 1845, aunque actualmente no tiene actividad) y el elegante Mercado Hidalgo, con una magnífica portada labrada en cantera e inaugurado en 1910 y que hoy aloja más de 100 locales.
Haciendas y naturaleza
En los alrededores de Salvatierra podrás descubrir varias haciendas de interés, como: San José del Carmen, Santo Tomás de Guatzindeo y San Nicolás de los Agustinos.
Por otra parte, al suroeste del centro se abre el bonito Eco Parque El Sabinal con zona de juegos infantiles y maravillosas vistas. Para llegar a estos puntos te recomendamos cruzar el emblemático Puente de Batanes, construido por los monjes carmelitas en 1649, donde se desarrolló la batalla entre Ramón López y Agustín de Iturbide durante la Independencia. Para admirar mejor esta obra de la ingeniería civil tendrás que caminar por él y bajar hasta la orilla del río por el seminario franciscano.
También puedes conocer los bonitos paisajes que rodean a Salvatierra dando un paseo a caballo o hacer un día de campo a la orilla de la caída El Salto, sobre el Río Lerma.
Yuriria
A 30 kilómetros de Salvatierra se ubica este poblado que forma parte de la Ruta de los Conventos, por su hermoso Templo y Convento Agustino de San Pablo. En este Pueblo Mágico también podrás visitar la Laguna de Yuriria, considerada la primera obra hidráulica de la Nueva España y que hoy otorga agradables opciones de esparcimiento a sus visitantes.
Acámbaro
A 33 kilómetros de Salvatierra se localiza esta población que alberga el Templo y Convento de San Francisco que inició su construcción en 1734. Su portada barroca de cantera es sencilla; su interior es de estilo neoclásico y predomina un tono rosado. Su altar mayor es de los más hermosos del estado, combinando el gris de la cantera, el dorado del retablo y el rosa del muro. El convento es de la misma época y su patio destaca por la influencia árabe de colocar un árbol en cada esquina. Otros detalles notorios son el precioso nicho que guarda la imagen de la Virgen de Guadalupe y la bella fuente mudéjar que surtía de agua a la población localizada en su huerto.
Durante la guerra de Independencia, Iturbide se alojó en el convento agustino; al saber esto, el sacerdote José Antonio Torres prendió fuego al templo y a parte del convento. Por desgracia se perdieron antiguos retablos barrocos de madera.