Gallo miniatura, avecitas mexicanas como para coleccionar
El gallo miniatura azteca es un ave de corral extraordinaria: viene en cientos de colores diferentes, su cacaraqueo es único y es extremadamente noble, conoce más.
Los bonsáis nos resultan fascinantes porque tienen todo el esplendor de un árbol adulto pero en talla diminuta, lo mismo pasa cuando uno ve a un gallo miniatura, una especie que al igual que el xoloitzcuintle se está ganando su denominación como netamente mexicano.
Para que se den una idea, los gallos miniatura miden de adultos lo mismo que una paloma común, de esas que vemos en las plazas públicas del país, y pesan un promedio de 350 gramos los machos y 300 gramos sus gallinas.
La pasión por el gallo miniatura empezó en 1890
Y aunque la creación de esta “raza” empezó en Virgina, Estados Unidos, aproximadamente en 1890, según los expertos en la materia, la realidad es que fue en México en donde la reproducción se tomó en serio, dando paso a nombres para este animal como currito, kikirikí o gallo miniatura azteca.
Desde entonces, pues, este gallo les pegó duro a los apasionados de estos animales, porque empezaron a surgir criadores en todos los estados de la República Mexicana, aunque destacan Aguascalientes, Zacatecas y Jalisco, sobre todo en la región Los Altos de Jalisco, en donde hay decenas aficionados a la reproducción de esta ave pequeña.
Características de un gallo miniatura
Edgar Torres, un criador experto en la reproducción de gallo miniatura, explica que la Asociación de Gallos Miniatura Azteca, a la cual él pertenece, ha empezado a establecer los criterios con los que debe contar un buen espécimen, para así, también, poner orden en la crianza.
Así, definieron, que entre algunas de las características con las que debe contar se encuentra un color fuerte, definido, además de patas que no mida más de 4.6 centímetros y un plumaje en cola que sea de 40 grados.
El gallo miniatura con plumas de color fantasía
De hecho, con base en estos criterios, se han realizado concursos nacionales para ver quién ha creado el mejor kikirikí del último año, ganando algunas veces aquellos con el plumaje más espectacular.
Edgar Torres comenta que también hay aquellos gallos con colores de fantasía, los cuales se obtienen dependiendo del ingenio y la suerte del criador a la hora de realizar las cruzas adecuadas, todo un arte.
Gallo miniatura como mascota, hobbie o evitar problemas
Muchos papás compran un gallo miniatura azteca para regalárselo a sus hijos pequeños como mascota, otros para disfrutarlo ellos mismos, otros más para hacer de la cría de esta especie su hobbie o de plano su negocio. Porque al parecer este pasatiempo es siempre relajante y gratificante.
Y, parafraseando a un gallero de antaño (así como están las cosas en las calles del país) “un kikirikero más es un drogadicto menos en las calles”.