Descubre el pan de Acámbaro, tesoro gastronómico que debes probar
No te pierdas la oportunidad de saborear el auténtico pan de Acámbaro. Un verdadero tesoro gastronómico de la región de Guanajuato.
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El pan de Acámbaro, una tradición culinaria que perdura a lo largo del tiempo, se ha convertido en un emblema del estado de Guanajuato. Así que,si visitas la región Bajío, no puedes dejar de probar este delicioso pan que mezcla historia, cultura y sabor en cada bocado.
Un origen con sabor a historia
La historia del pan de Acámbaro se remonta a mediados del siglo XX. Se cree que su elaboración comenzó en San Pedro Bocaneo, Michoacán, y luego los panaderos llevaron la receta a Acámbaro. En sus orígenes, este pan se horneaba en piedra con leña, lo que le daba un toque ahumado muy característico.
Los ingredientes iniciales incluían azúcar, grasa de cerdo, pulque y harina. Sin embargo, al llegar a Acámbaro, la receta se modificó para adaptarse a los ingredientes locales y a los gustos de la región. La adición del huevo fue una de las innovaciones que definió el sabor único del pan de Acámbaro.
El pan de Acámbaro se presenta en tres variantes clásicas: tallado, ranchero y picón. Aunque con el tiempo surgieron otras versiones como el pan de leche, el tornillo y las acambaritas.
La receta básica incluye harina, huevo fresco, azúcar, agua, sal y aceite, aunque algunas versiones también utilizan leche o especias. Las acambaritas, pequeños bollos de unos diez centímetros de diámetro, vienen en sabores como vainilla, chocolate y napolitano.
Los panes más grandes y tradicionales, como el famoso pan de Acámbaro, pueden pesar varios kilogramos, dependiendo de la receta específica de cada familia o negocio. Estos panes se hacen con harina de trigo, mantequilla, azúcar, huevos, leche y levadura, entre otros ingredientes, y mantienen la esencia que los ha hecho famosos.
¿Dónde encontrar el pan de Acámbaro?
Las panaderías en Acámbaro no solo venden sus productos localmente, sino que también los exportan a diferentes ciudades de Guanajuato y otros estados como Ciudad de México, Querétaro, Toluca y Michoacán. En el Bajío, es común encontrar este pan en municipios como Yuriria y Salvatierra.
Los precios pueden variar, llegando hasta los 65 pesos por unidad, dependiendo de la panadería. Además, el pan de Acámbaro cuenta con su propia festividad: la Feria de la Panificación. Durante este evento, los panes se regalan a los visitantes en la «Lluvia del Pan«, un festejo en honor a la Virgen del Refugio, patrona de Acámbaro.
El pan de Acámbaro no solo es un deleite para el paladar, sino también una tradición que representa la riqueza cultural y gastronómica de Guanajuato. Al probarlo, estarás disfrutando de siglos de historia y preservando una costumbre que se resiste a desaparecer.
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