Tour de cerveza en Guadalajara
Con este tour de cerveza en Guadalajara podrás conocer la capital de Jalisco desde otra perspectiva: fresca, divertida y deliciosa.
Conoce los bares donde se sirve la mejor cerveza en Guadalajara, esa que es artesanal y se acompaña de peculiares botanas como las palomitas de camarón.
¿Te atreves a hacer este tour de cerveza en Guadalajara?
La Avenida Chapultepec de Guadalajara es una larga calle del siglo XIX. Aquí encontrarás cafés, restaurantes y bares encimados.
Los sábados, además, pintores, libreros y artesanos comparten sus pequeños tesoros con los transeúntes en los camellones. Hay muchas formas de recorrer esta maravillosa ciudad, puedes disfrutarla a través de su arquitectura, sus museos, sus tiendas y, por qué no, sus bares.
Haz este tour de cerveza en Guadalajara y conoce la Perla Tapatía a tragos.
Primera parada: LaCer Laboratorio Cervecero.
Mi primer parada en busca de sabores a malta fue ese mercado, un dispensario de cervezas locales servidas de barril.
Ahí pueden probarse las creaciones de Loba, Pecado Capital, Fortuna, 7 Mares, KVRA, o Hércules —esta última es una cervecería queretana que comparte el espacio con el resto de origen tapatío—.
También están las cervezas de Cholos Brewing: como todavía no tienen su propio tap room, es en LaCer donde hay que buscarlas. Me acuerdo bien de una de Cholos, se llama Vieja Bruja. Es una American Pale Ale afrutada, llena de mango, que dan ganas de encontrarla en otros lados.
Patán Ale House
La siguiente parada en este tour de cerveza en Guadalajara es a cuatro cuadras, sobre la calle Morelos.
Patán está en el corazón de la colonia Americana. Tiene 24 líneas de cerveza y apenas un año de abierto. Es el lugar indicado para conocer más etiquetas de Guadalajara, como gdl Brewing, Diógenes, California Brewing y Santa Sabina; o degustar las combinaciones de lúpulos que se elaboran en otras latitudes tanto nacionales como extranjeras —Ballast Point y Mikkeller forman parte de la carta—.
Los fines de semana hay música de vinil, y los espumosos vasos se acompañan de palomitas de camarón, costillas bbq o emparedados de roast beef con cebolla morada marinada en Stout.
La tradición de Santa Tere
A unas calles al noreste de Patán se esconden, en una casa sin letrero sobre la calle Gregorio Dávila, los tanques de acero inoxidable de la fábrica de Loba. Alrededor: los populares negocios del barrio de Santa Teresa.
Dentro: las maravillas fermentadas por esta marca que desde 2012 sacó a la venta sus cervezas. Alejo Magallanes dirige el vaivén del precioso líquido, pero es el maestro cervecero Abraham Espadas quien lo crea y acumula con él premios.
Tienen seis cervezas de línea; una Altbier llamada Alteña, la Sport que es una Witbier, a su Porter le dicen Negra, Alfa es una Indian Pale Lager, mientras que Clandestina una Pre-Prohibition Lager, y su Gose Mexicana es Paraíso.
Porque no solo de cerveza vive el hombre
Para poder continuar con este tour de cerveza en Guadalajara, y en cualquier lugar, es indispensable comer.
En la parte de arriba de la fábrica de Loba, con vista al diario quehacer artesanal, se halla Umho, el restaurante que hace poco abrió Alejo junto con Pavel Carillo y Javier Rodríguez.
Me senté en una de las mesas comunales. Pedí el pay de carne, volvería a pedirlo siempre. Pero el menú es un acierto tras otro: desde los espárragos con crema de ajo, hasta el pollo rostizado con hongos o el cerdo braseado en malta.
Son dieciséis las líneas de cerveza que acompañan los platillos. Las seis de las casa, algunas invitadas y otras con las que el maestro Abraham experimenta por temporadas —como Gose La Vieja, hecha con duraznos y magia, madurada en barrica‒.
Puesto Ambulante
Otra de las paradas obligatorias de este tour de cerveza en Guadalajara está no muy lejos, también en Santa Tere, queda el sitio donde es posible encontrar los ensayos personales de Abraham Espadas.
Se llama Puesto Ambulante, está en la calle Juan Manuel y abre por las tardes. No hay adornos, solo cervezas y una pequeña carta de comida inspirada en lo que las cantinas, los puestos callejeros tienen: sabor. En los fogones hay cecina, flores de calabaza capeadas, birotes con carnitas, sopes de pancita de cerdo.
La idea es encontrarle maridajes a lo cotidiano. Tarara, Canalla y Cambuja son las tres cervezas que nunca faltan aquí. La primera es una Lager de arrabal, de pueblo, pensada para refrescar bailes.
Lleva el nombre de un cabaret que trajo la cumbia colombiana a Jalisco. La segunda es una American Strong Ale obtuvo una medalla de bronce en 2016. Y Cambuja es una Mexicana Stout hecha con cacao y café del Soconusco. Hay otras más. Yo supe de la Sour Limón y Café Moras. Abraham utiliza poco lúpulo y muchos los ingredientes locales.
Casa trapiche
La última parada de este tour de cerveza en Guadalajara ha llegado y está a contra esquina del Puesto Ambulante, en Casa Trapiche, el nuevo tasting room de Cervecería de Colima.
Entrar es tener cerca la larga lista de cervezas que se fabrican allá, al sur, en las faldas del Volcán de Fuego en el estado vecino. Las suyas llevan el paisaje dentro: agua del río Colima, flor de sal de Cuyutlán, maracuyá de Minatitlán. Tienen también cosas que contar.
Porque lo mismo se interesan en honrar la naturaleza, como en el caso de las Sesiones del Pacífico, inspiradas en el Archipiélago de Revillagigedo; que participar junto con Loba y otras cervecerías estadounidenses en las Sesiones del Migrante, pensadas para recordar con sabores frescos a quienes se van a pizcar lúpulo en el valle de Yakima, en Estados Unidos, dejando atrás Colima y Jalisco. Espero
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